Acabas de superar un proceso de selección y ha llegado el momento de comunicarlo a tu empresa. Estas contento, llevabas tiempo buscando un cambio de empleo y la nueva empresa te gusta, has estudiado sus posibilidades y el proyecto que te ofrecen te resulta ilusionante.

¡Por fin ha llegado el momento que estabas esperando! Estás a punto de lanzarte a una nueva aventura profesional.

Pero al comunicarlo a tus jefes recibes una contraoferta, te ofrecen nuevas condiciones, mejora salarial, cambio de puesto…, llevabas años esperándolo. ¿Y ahora…?

 ¿Qué podemos hacer en esas circunstancias cual es la mejor opción que podemos tomar?

Es una decisión complicada en la que intervienen distintos factores, motivos, emociones, posibilidades de desarrollo profesional… que deberás valorar para tomar tu mejor decisión.

Te pueden resultar útil hacerte una serie de preguntas como las siguientes: - ¿Cuáles fueron los motivos que me llevaron a la búsqueda de un nuevo proyecto?

- ¿Las nuevas condiciones que me proponen, salario, puesto… solucionan los motivos que me llevaron a la búsqueda de un nuevo empleo?

- Como reaccionará mi empresa actual en el medio plazo, hay muchos motivos por los que pueden intentar retenerte en el corto plazo, como la imposibilidad de encontrar un sustituto de forma rápida, el presupuesto anual… pero ¿y después? ¿seguirán confiando en mí?

- ¿La contraoferta consigue que desaparezcan las sensaciones negativas? Un aspecto importante que debes poner en juego son tus emociones, las que han llevado a abrir nuevos caminos.

- ¿Dónde consideras que puedes tener mayores posibilidades de desarrollo profesional?

- ¿Qué te ofrece la nueva empresa que no tengas en la actual?

Valorar todos estos los aspectos te puede ayudar a elegir tu mejor opción.